Limodorum abortivum
sin. Orchis abortiva.
Etim. del griego Haemodorum, nombre que dio Teofrasto a una planta parasita de flores rojizas, posiblemente un Orobanche. El nombre específico procede del lat. abortivus, abortado, por las hojas reducidas a escamas, por tanto no tiene esta planta ningún principio activo que pudiera producir los efectos que sugiere.
Se trata de una orquídea saprofita que carece de clorofila para sintesizar los azúcares. En general, todas las orquídeas precisan de un agente externo para germinar. Sus minúsculas semillas carecen de sustancias de reserva para su desarrollo embrionario. Este agente externo es un hongo que invade la semilla aportándole a continuación los azucares necesarios para su crecimiento. Se establece así una relación micorrícica entre el embrión de la orquídea y el hongo que dura hasta que la planta es capaz de valerse por sí misma, cuando desarrolla sus primeras hojas verdes. En el caso del Limodorum esta dependencia nutricia parece ser que perdura toda la vida de la planta. En cambio, otros autores, afirman que las orquídeas de este género son capaces de establer relaciones micorrícicas con otras plantas verdes y son éstas las que las nutren en una dependencia parásita. Desde el punto de vista biogeográfico se distribuye por la Región Mediterránea, C y W de Europa. Dispersa por la mayor parte de la península Ibérica y Baleares, rara en el NW. En Puerto Real se la puede ver en el Pinar de las Yeguas y más escasamente en el Pinar de las Canteras -a partir del mes de abril- siempre en bordes de cortafuegos y zonas aclaradas. Gusta de situarse bajo el abrigo de los matorrolales, casi siempre coscojas. En el resto de la provincia es muy escasa, localizándose dos o tres de sus poblaciones en la Serrania de Grazalema y otras tantas en el Campo de Gibraltar. En Andalucía se encuentra tambien dispersa por todas sus provincias sin faltar en ninguna. En su descripción destacamos el color violeta rojizo que presentan sus partes aéreas. El tallo es glabro, erecto y rígido, de hasta 60 cm de altura; sus hojas reducidas a escamas envainantes, color violeta intenso, con fuerte nerviación. Inflorescencia laxa con 10-20 flores violetas con un corto pedicelo. En sus partes florales destaca el sépalo y pétalo medios curvados sobre el ginostemo en forma de cofia. Labelo entero, ensanchado en el ápice, con los márgenes ondulados violetas, com matices amarillos, dividido por un estrechamiento. Las plantas producen tallos florales de manera irregular a lo largo de varios años, pasando otros periodos de forma subterránea. En ausencia de insectos las flores se autofecundan, alcando un porcentaje de fructificación cercano al 60 %. Cada cápsula produce entre 14.000 y 16.000 semillas. En las Yeguas hemos encontrado algunas plantas ramoneadas por el ganado, con el extremo superior decapitado, siendo éste y la accion humana de los visitantes del área recreativa los riesgos que actualmente sufre la especie en esta zona.
La foto: Realizada por mi buen amigo Juanjo Ruibal. ¡Parece mentira el partido que se le puede sacar a una pequeña compacta de 3 Megapixel! Lugar: Dehesa de las Yeguas (Puerto Real, Cádiz). 8-abril-2006. Cámara: Nikon Colpix 3100, 1/85, f: 4.9, ISO: automático; compensación: -0.7 EV. Procesado (Picasa) recorte parcial, máscara de enfoque y pequeños retoques a la iluminación y contraste.
1 comentario:
Te gusta la fotografia y lo haces como los dioses!!!
Un beso tu amiga q tenes abandonada..jijijijij
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