jueves, agosto 31, 2006

SOS Pinar del Hierro (Chiclana)


Miren bien esta foto. Tienen delante al mejor de todos los pinares costeros gaditanos. En sus escasas 60 hectáreas alberga casi 400 especies vegetales, 23 de ellas endémicas o amenazadas y, por tanto protegidas. Posee más endemismos que varios países de Europa juntos (Inglaterra sólo tiene cinco y Alemania quince). Pero buena parte de este patrimonio se puede perder porque ha caído en manos del negocio del ladrillo, de los especuladores sin escrúpulos, de los que están llenando todo el litoral andaluz de chalecitos para ricos. De poco han servido hasta ahora las denuncias de 50 asociaciones de vecinos, las presiones ecologistas, las pancartas, los escritos a la prensa, las concentraciones en la finca, ni siquiera las demandas de la todopoderasa Greenpeace, ni la mediación del Defensor del Pueblo Andalúz. Nada los detiene. El Ayuntamiento tambien se frota las manos y la Junta de Andalucía mira para otra parte, como si no fuera con ellos, como si las leyes de protección de la Flora y Fauna que ellos mismos han aprobado en el Parlamento no les incumbiera. Y el pueblo asiste atónito a este espectáculo de horror. Hace unos días debrozaron 23 hectareas de matorral y destruyeron numerosas poblaciones de flora protegida. Ya tienen marcados los pinos para talarlos y los peritos no paran de medir terrenos. ¡Y aún no tienen ni licencia para edificar! Miren bien las fotos que les muestro ahora, no son un prodigio de la técnica y están hechas todas con mi antigua cámara compacta. Pero no importa, todas son especies muy valiosas no sólo para la ciencia, sino un patrimonio de todos que nadie se puede arrogarse como propio, por muy dueño que sea de la finca. Son las últimas poblaciones andaluzas de estas especies y están ahí desde hace millones de años. El hormigón les caerá encima dentro de unos meses, a lo sumo un año. Pero el Alcalde cree que ha logrado una gran victoria política, pues más de la mitad de la finca se salvará y pasará a manos municipales, el resto desaparecerá bajo el empuje de las palas excavadoras. Pero eso sí, muchas familias vendran a vivir en contacto con la naturaleza y serán muy felices, y luego llevarán a sus hijos a clase equitación mientras ellos se entretienen jugando al golf. Malditos seais todos los hipócritas que llamais a esto progreso, malditos los que os llenais los bolsillos a costa de la destruccion de la naturaleza, malditos los que pudiendo evitar esto lo vais a consentir, malditos seais...

















Atardecer en el Pinar del Hierro














Thymus albicans













Centaurea aspera subsp. escorpiurifolia














Hymenostemma pseudoanthemis













Narcissus viridiflorus


















Juanjo y la Spiranthes spiralis


















Detalle Spiranthes spiralis

Las fotos: Camara Olympus Camedia 5050. Pinar del Hierro de Chicalna (Cádiz). Año 2005.

sábado, agosto 19, 2006

El Gran Duque
























No hay nada más grande ni más imponente que esta colosal ave surcando silenciosamente el crepúsculo de las montañas ibéricas. Es el Rey de la noche. Situado en su posadero habitual- una gran rama de encina que oculta su cueva en un escarpe rocoso- proclama con su penetrante uhhhhhh, uhhhhh...que busca novia nada más comenzar el invierno.

Il n´y a ni plus grand ni plus sublime que cet oiseau colosal qui survole silencieusement le crépuscule des montagne ibériques. Il est le roi de la nuit. Situé en son éspace vital habituel - une grande branche de chêne qui cache son alvéole dans une pente rocheuse - il proclame ses cris pénétrants uhhhhh,uhhhh... qu´au comencement d´hiver il cherche une copine.

Es gibt weder etwas Groesseres, noch etwas Ueberwaeltigenderes als diesen ungeheuren Vogel zu beoachten, wie er im Morgengrauen leise die iberischen Berge uebergleitet. Er ist der Koenig der Nacht. In seinem natuerlichen Lebensraum - einem grossen Eichenast, der seine Hoehle an einem steinigen Berghang verdeckt - laesst er seine durchdingenden Rufe verlauten: uhhhh uhhh ... die just zu Beginn des Winters seine Suche nach einer Freundin verkuenden.


















Las montañas de la Sierra de Grazalema (Cádiz) son el escenario perfecto para contemplar los movimientos de estas rapaces. Con un poco de suerte, al atardecer, subiendo la sinuosa carretera del Puerto de las Palomas y esperando en silencio con los prismáticos siempre dispuestos y la cámara armada de un buen teleobjetivo, preferentemente entre enero y febrero... apararecerá -de improviso- nuestro héroe, con una perdíz entre las garras.

Les montagnes de la Sierra de Grazalema (Cadix) représentent une scène parfaite pour contempler les mouvement de ces rapaces. Avec un peu de chance, au couché de soleil, parvenant la route sinueuse du Puerto de las Palomas et attendant en silence, les jumelles toujours prêts et l´appareil photos armé d´un bon téléobjectif, de préférence entre janvier y février... apparaîtra - soudainement - notre héro, avec un perdrix entre les griffes.

Die Berge der Sierra de Grazalema (Cádiz) sind der perfekte Schauplatz um die Bewegungen dieses Raubvogels zu beobachten. Mit ein wenig Glueck, in der Abenddaemmerung, die kurvige Strasse des Puerto de la Paloma hingekommen in Stille wartend, die Fernglaeser immer bereit un die Kamera mit einem guten Teleobjektif bewaffnet, vorzugsweise zwischen Januar und Februar... erscheint - urploetzlich - unser Held, ein Rebhuhn zwischen den Krallen.


Es la pitanza que ofrecerá a su hembra que incuba -en la oculta cueva- al menos cinco grandes huevos. Pronto volverá a salir el Gran Duque por una nueva presa para su amada. Es incansable. De nuevo -dos o tres movimientos de sus alas- seguidos de un largo planeo rasante entre los arbustos de la extensa ladera de Monte Prieto y sorprenderá ahora a un conejo que trizcaba las primeras hierbas de la la primavera.

C´est la nourriture quotidienne qu´il offrira à su femelle qui accouve - dans l´alvéole chaché - au moins cinq grands oeufs. Bientôt le Gran Duc s´envolera pour chercher une seconde proie pur son amour. Il est infatiguable. De nouveau - avec deux ou trois mouvement de ses ailes - suivis d´un long et rasant vol plané entre les buissons de la vaste versant de la montagne de Monte Prieto - il surprendra un lapin qui croquait les premières herbes du printemps.

Es ist die taegliche Verkoestigung die er seinem bruetenden Weibchen bringt, das in der versteckten Berghoehle mindestens fuenf Eier heranreifen laesst. Bald fliegt der Gran Duque wieder aus um eine weitere Beute fuer seine Geliebte zu suchen. Ein weiteres Mal - mit zwei oder drei kraeftigen Fluegelschlaegen, gefolgt von einem rasanten Gleitflug zwischen den Bueschen des weitlaeufigen Berghangs des Monte Prieto - wird er ein Kaninchen ueberraschen, das ahnungslos die ersten Graeser des Fruehlings muemmelte.


Cuando viví en la Sierra por espacio de ocho años escuché de un cazador una historia increible entre los buhos y los hombres. Aquel cazador que localizaba un nido de buho real tenía asegurada cacería gratis por espacio de uno o dos meses. La pareja de buhos cazaría para él mientras los pollos de buho permanecieran en el nido.

Je vivais dans la Sierra pendant huit ans et en ce temps-là j`avait la chance d´apprendre d´un chasseur de là-bas des histoires incroyable sur les relations entre les hommes et les buhos. Ce chasseur-là, ayant trouvé un nit de buho, s´était assuré un tableau de chasse gratuit pour une periode d´un ou deux mois. Le couple de buho chasserait pour lui pendant que les poussins étaient toujours dans le nit.

Als ich selbst fuer einen Zeitraum von acht Jahren in der Sierra lebte hatte ich das Glueck von einem der dortigen Jaeger eine unglaubliche Geschichte ueber die Beziehung zwischen Buho und Mensch zu erfahren. Ebendieser Jaeger hatte sich durch das Auffinden eines Buho-Nests kostenlose Jagdbeute fuer ein bis zwei Monate gesichert: das Buho-Paar wuerde fuer ihn jagen solange die Kueken im Nest heranwuchsen.


La operación era tan fácil como poner a los pollos una caparuza de cetrero en sus cabezas. Los padres les dejaban diariamente varias piezas de caza enteras para que los pollos aprendieran a despedazarlas. El ruín cazador solo tenía que apropiarse de los conejos y las perdices y alimentar a los pollos con despojos de la carnicería del pueblo. Luego -al marcharse- volvía a poner la caperuza a los pollos y a esperar al día siguiente. Una vez más la condición humana no tiene límites. Actuamos como auténticos parásitos alterándolo todo para nuestro propio beneficio. Así nos va.

Le procédé ne pouvait être plus simple: il ne faillait que mettre aux poussins une capuche de fauconnier sur les têtes. Les parents leur apportaient journellement plusieurs proies de chasse entiers à fin que les poussins aprenissent à les déchirer. Il ne restait au vil chasseur que s´approprier les lapins et les perdrixes puis nourrir les poussins avec des abats de charcuterie du village. Après - en partant - il recouvrait la tête des poussins de la capuche et attendait jusqu´au lendemain. Voilà un autre témoignage que la condicion humaine ne connaît pas de limite. On agit comme des véritables parasites, dénaturant ce qui nous convient pour notre propre profit.

Seine Vorgehensweise haette einfacher nicht sein koennen: er tat nichts weiter, als den Kueken eine Falknerkaputze ueber den Kopf zu stuelpen. Die Eltern brachten ihnen taeglich mehrere vollstaendige Beutestuecke, damit die Brut lernte, diese zu zerfleischen. Dem listigen Jaeger blieb also nur, sich die Kaninchen und Rebhuehner anzueignen und im Gegenzug die Kueken mit Abfaellen der Fleischereien des Dorfes zu ernaehren. Im Anschluss setzte er ihnen die Kapuze wieder auf und wartete auf den naechsten Tag. Ein weiterer Beweis dafuer, dass das menschliche Handeln keine Grenzen kennt. Wir verhalten uns wie Parasiten und sind bereit unsere gesamte Umgebung zu veraendern wenn dies unserem eigenen Profit dient.




Texto: fito mendi. Traducción: claudine etavard.

Foto superior: 14/06/2006. Castillo de las Guardas (Sevilla). Cámara Olympus E-500. Objetivo 1/500, ISO: 800. Procesado: Photoshop para rellenar sombras y Picasa: recorte, máscara de enfoque y máscara de desenfoque.

Foto inferior: 13/03/2006. Carretera del Puerto de las Palomas (Cádiz). Mismo equipo, mismos parámetros. Procesado: Picasa: máscara de enfoque.






viernes, agosto 18, 2006

Juniperus phoenicea subsp. turbinata












fam. Cupresaceas
Sinónimos: Juniperus turbinata
n. vulgar: Sabina costera

Terminamos con esta entrada los dos últimos juníperus gaditanos. Ahora presentamos las dos sabinas que tenemos en la provincia, una de la costa, que se llevará el mayor protagonismo -y la otra, la sabina de la Sierra de Cádiz- cuyas ligeras diferencias morfológicas y su adaptación a estos enclaves serranos durante miles de años la han ido diferenciando y por tanto se la ha hubicado taxonómicamente como una subespecie diferente. Juniperus phoenicea subsp. turbinata es un arbusto o arbolillo con hojas diminutas en forma de escamas imbricadas las unas sobre las otras (parecidas al ciprés) y dispuestas en cuatro pequeñas filas. Ápice de ramillas muy prolongado, excediendo ampliamente las ramillas laterales inmediatas. Los frutos son gálbulos con una corteza algo carnosa de color rojizos, ovoideos, 12-14 mm.Vive sobre sustratos arenosos donde puede formar sabinares compactos con ejemplares de gran tamaño, a menudo compartiendo este habitat junto a los pinos (Pinus pinea). Se distribuye por toda la orla mediterranea occidental, alcanzando el norte de Marruecos. En Andalucía esta presente en el borde litoral de todas las provincias costeras. En la Bahía de Cádiz es una especie habitual acompañante de los pinos. En Puerto Real es muy abundante, sobre todo en el Pinar de la Algaida y Las Canteras. Tambien está presente en otros pinares y forma parte de la vegetación de las Cañadas. La amenaza más grave que sufre la especie se deriva de la expansión urbanística que sufre todo el litoral y la proliferación de los incendios forestales. Su status es de especie protegida y está incluida en la Lista Roja de la Flora Vascular de Andalucía, categoría VU (vulnerable). Para la organización internacional IUCN, nuestra sabina costera tambien merece la misma consideración VU (vulnerable). Juniperus phoenicea subsp. phoenicea se diferencia sólo de J. turbinata en las terminaciones de sus ramillas que son cortas (no excediendo las ramillas laterales inmediatas) y -sobre todo- por sus frutos globosos ligeramente más pequeños 8-10 mm. Las sabinas adultas no tienen confusión con los tres enebros presentados anteriormente por el caracter imbricado de sus hojitas, pero no es así cuando son plántulas de menos de dos años, presentando las primeras hojas aciculares como el resto de los enebros, lo que nos puede llevar a equivocos en su identificación. Mi amigo Cristobal Orellana, conocido en Zahara como "El Orejito" y del que tengo el honor de haber aprendido casi todo lo que sé de las plantas serranas, lo explicaba muy bien: "La sabina cuando chica, nace nebro, pero después se vuelve sabina". Tambien la sabina serrana está incluida en la Lista Roja de la Flora Vascular de Andalucía, pero con menor grado de amenaza (NT=casi amenazada). Aunque sufre los impactos del ganado, los incendios y una baja regeneración natural, el hecho de situarse sus poblaciones en Espacios Protegidos, supone una mayor garantía y un menor riesgo para su supervivencia. En el caso de ambas especies comparten casi los mismos pricipios activos: aceites esenciales en 1.5% que contienen d-sabinol (16%) y, en forma de acetatos (40%) un alcohool triterpénico. Por espectrogramas se han identificado otros compuestos en cantidades menores (mirceno, cimeno, limoneno, , carvacrol, ..) y componentes de ceras de otras coníferas (ácido sabínico, junipérico y tápsico). La naturaleza de sus componente la convierten en una especie tóxica para el ser humano. Antiguamente se la utilizaba como abortiva, pero los riesgos de mortandad a partir de determinadas dosis la adesaconsejan claramente para la medicina casera. De hecho la sabina esta incluida en la Orden Ministerial 190, de 28 de enero de 2004, por la que se establece la lista de plantas cuya venta está prohibida o restringida por razón de su toxicidad.

Foto superior: Juniperus phoenicea subsp. turbinata. 20/12/2005. Las Canteras, Puerto Real (Cádiz). Cámara Olympus E-500, objetivo Zuiko 45-150 mm. f:8, 1/160 seg. ISO:200. Picasa: máscara de enfoque. Foto inferior: Juniperus phonicea subsp. phoenicea. 5/02/2005. Jardín Botánico El Castillejo (El Bosque). Cámara Nikon Kolpix f:2.8, 1/121 seg. ISO: 100. Foto cedida por Juanjo Ruibal.

jueves, agosto 17, 2006

Juniperus navicularis Gan



Fam: Cupresaceas
sin. Juniperus oxycedrus subsp. transtagana

Si de
J. macrocarpa decíamos que era una joya botánica, para este enebro no tenemos nombre, pues sólo se ha determinado la exactitud de su presencia en España hace unos pocos meses. Y digo con exactitud porque las citas de Juniperus naviculares que se recogen en la bibliografía especializada (Flora Ibérica y la Flora Vascular de Andalucía Occidental) debemos tomarlas como erróneas por no estar ni bien determinada la especie ni su distribución biogeográfica, pues las citas de Cádiz y Almería entre 500 y 1000 m sobre el nivel del mar no se corresponden con su hábitat natural. Las únicas poblaciones ibéricas conocidas hasta ahora -y bien estudiadas- se encuentran en el Algarve portugués, por tanto, la primera cita contrastada de Juniperus navicularis en España debemos agradecerla al equipo de Sánchez Gacía, I y sus colaboradores Vasallo, F. y Rodríguez, J. que presentaron este hallazgo en las pasadas Jornadas de Historia Natural celebradas en junio de 2006 en Jimena (Cádiz). A mi compañero Juanjo Ruibal y a mí mismo nos cabe el honor de haber colaborado con este proyecto ayudando a localizar las escasas poblaciones que existen actualmente en Puerto Real (Cádiz), por el momento las únicas conocidas en todo el territorio nacional. Así pues, estamos ante un taxón bastante poco estudiado y que ha pasado desapercibido para la ciencia durante más de 200 años de desarrollo de la botánica en nuestro país. El hecho de tratarse de un arbusto de hasta casi dos metros (frecuente mucho menores) hace inexplicable y al mismo tiempo apasionante esta ciencia en la que podemos concluir -con este ejemplo- que es precisamente su dinamismo y constante reformulación, lo que la hace sumamente interesante para las personas que miramos el mundo con curiosidad. Este enebro, que comparte el habitat litoral de pinares costeros gaditanos con el enebro de la miera, se distingue fácilmente por su menor porte (raramente sobrepasa 1.5 m de altura), sus acículas más cortas 4-12 mm (generalmente 5-7 mm), patentes; manteniendo las dos franjas estomáticas blancas como aquel en sus hojitas. El fruto (gálbulo) también es menor (entre 7-10 mm, frecuentemente -8 mm) de forma globosa y de color rojizo o amarillento sin aspecto pruinoso. Habita los claros de pinares (Pinus pinea) y bordes de los mismos, desapreciendo cuando el monte se cierra o aumenta la umbría del pinar. Por el momento sólo hay determinadas cinco pequeñas poblaciones de escasos individuos (10-20 pies y ejemplares aislados), todos ellos con escasísima fructificación, por lo que es de suponer que la mayoría de ellos se hayan propagado por vía vegetativa. El status de la especie es de extrema vulnerabilidad, dado el escaso número de individuos que garantice la supervivencia unido al hecho de no encontrarse en ningún espacio natural protegido. Abogamos- por tanto- por su inclusión urgente en los listados de flora amenazada y se tomen las medidas para garantizar su supervivencia futura.

Las fotos:18-05-2006. Pinares de Puerto Real (Cádiz). Cámara Olympus E-500, objetivo Zuiko macro 35 mm, f: 8, 1/800 seg. ISO: 800. Procesado Picasa=recorte +máscara de enfoque.

Juniperus oxycedrus subsp. macrocarpa





n.vulgar:Enebro marítimo
Fam. Cupresáceas.
Sin: Juniperus macrocarpa

Una de las joyas botánicas del litoral de Cádiz y Huelva. El enebro marítimo se distingue claramente de J. oxycedrus subsp. oxycedrus por sus hojas aciculares de mayor tamaño 20-25 x 2-2.5 mm con ápice punzante. Y sobre todo por su fruto mucho más grande 12-15 mm de ahí su nombre (macrocarpa=fruto grande); también por su corteza pardo grisácea de naturaleza fibrosa. Los estróbilos se situan como en aquel en pies machos y hembras (especie dióica) siempre en los extremos de las ramillas para facilitar la polinización anemófila (viento). El fruto contiene 2-3 semillas, aunque puede contener excepcionalmente hasta 7. Las semillas tienen un porcentaje de germinación muy bajo si no son digeridas por las aves. De hecho para su germinación in vitro se requiere su inmersión en una solución ácida que disuelva parcialmente su cubierta externa (lo mismo que ocurre en los estómagos de las aves). Su hábitat está ligado a los arenales y acantilados costeros, aunque puede formar parte del sotobosque de pinares (Pinus pinea) próximos al mar, como ocurre en el P.N. del Pinar de Barbate (Cádiz) donde se encuentran los ejemplares de mayor porte (hasta 5 m). Se distribuye por la región mediterránea. En Andalucía ocupa la provincia Gaditano-Onubo-Algarbiense, sectores Gaditano y Onubense. Algunas de sus poblaciones han sido fuertemente diezmadas debido a la urbanización del litoral como la existentente en Roche (Chiclana). La población de Sanlúcar había quedado reducida a un sólo ejemplar que terminó desapereciendo en un incendio forestal y la de Rota sólo contiene tres. Actualmente esta especie está sujeta a planes de recuperación por la Comunidad Andaluza. En Puerto Real no se encuentra de forma natural, aunque hay varios ejemplares en el Parque de las Canteras introducidos mediante repoblación. En Huelva la situación es mejor, con la presencia de poblaciones saneadas en Doñana y en Paraje Natural de los Enebrales de Punta Umbría. La madera del enebro marítimo se ha usado, por su naturaleza resistente, flexible y practicamente incorruptible, para diversas aplicaciones como dinteles de puertas y ventanas, postes de minería, pequeñas vigas para techumbre, etc.. Igual que el enebro de la miera, su madera y raíces, se han destilado para la obtención de aceites esenciales y preparaciones veterinarias contra la roña del ganado. Su status legal es de especie protegida y viene incluida en diversos catálogos como especie "en peligro de extinción" (Catálogo de Flora Amenazada de Andalucía, Lista Roja Nacional de Flora Amenazada) y la UICN la caracteriza como EN (en peligro).

La foto: 16-03-2004. Pinar de las Canteras, Puerto Real (Cádiz). Cámara Olympus C-5000Z, focal: supermacro 8 mm, f: 2.8, 1/320 seg, ISO: 160, compensación -0.6 EV. Procesado Picasa=recorte parcial+máscara de enfoque.

miércoles, agosto 16, 2006

Juniperus oxycedrus subsp. oxycedrus





















fam. Cupresaceas
n. vulgar: cada, enebro de la miera, oxicedro

Iniciamos la introducción al género Juniperus con el taxón más común de los que habitan en Cádiz, el enebro de la miera, llamado así porque de sus raíces -por destilación- se obtiene un aceite medicinal que ha servido históricamente para el tratamiento de las enfermedades del ganado, especialmente las ovejas, a las que se les aplicaba "la miera" para evitar infecciones en la piel tras su esquilado. Su área natural en Cádiz son las montañas de la Sierra de Grazalema, donde vegeta con facilidad junto a encinas, pinsapos y quejigos, formando parte del sotobosque mediterráneo de estas formaciones forestales. En Zahara de la Sierra existe el llamado Puerto del Horno de la Miera, donde aún hoy quedan restos de los alambiques que sirvieron durante décadas para la obtención de esta esencia medicinal. Mucho más raro es encontrarlo a nivel del mar, aunque no imposible, pues es un arbusto localmente frecuente en determinados tramos de cañadas de Puerto Real -junto a la Barriada de la Chacona- y la carretera de Medina. Y sobre todo es muy abundante en el pinar de los Ojuelos (cerca del Barrio Jarana) aunque casi todos sus pies están fuertemente ramoneados por la acción del ganado. En su día debió tener una distribución más amplia en el litoral, pues en las Canteras de Puerto Real (pequeña area forestal ya totalmente urbana) aún quedan pies aislados de esta especie. Es un matorral que se extiende por toda el área mediterránea, ocupando la Península Ibérica, excepto el NW donde falta. Normalmente se trata de un arbusto de hasta 3 m de alto, aunque puede adoptar porte arbóreo con alturas de hasta 6-8 m en condiciones muy favorables. Su copa es tupida, de forma cónica, y terminada en punta. Corteza pardo-rojiza y ramillas finas, con remate apical descendente. Hojas verticiladas de tres en tres, aciculares, cortas y rígidas. Cada hojita posee dos líneas de estomas blancos paralelos separadas de otra linea verde más estrecha. El enebro es especie unisexual dioica con pies machos y hembras. Los frutos son muy característicos, globosos u ovoideos, pequeños, de naturaleza carnosa y abayados, llamados arcéstidas, verdosos al principio y ya maduros (2º año) de color pardo-rojizos. Su madera es aromática (parecida al olor de la madera de cedro, de ahí su nombre genérico), rojiza, de grano fino, resistente a la humedad y fácil de trabajar, aunque de poco interés para ebanistería por su escaso diametro. El aceite de miera contiene hasta un 25% de fenoles, entre los que destaca el guayacol (12 %). El aceite esencial contiene además carburos como el cadineno (un sesquiterpeno con efectos bactericidas). Por todo ello la industria farmacológica lo utiliza actualmente como base de preparación de anticépticos y parasiticidas. En cosmética se utiliza para el tratamiento de la caspa y los cabellos grasos. El status de la especie parece asegurado en la Sierra de Grazalema, pues se encuentra en un espacio natural protegido en estas zonas montañosas de Cádiz, sin embargo, las poblaciones del litoral están amenazadas y su futuro dependerá de la gestión correcta que se haga de la especie para evitar su desaparición. Sanchez García, I-2002, la caracteriza como "especie vulnerable" para el entorno de la Bahía de Cádiz.

La foto: 27-02-2006, Cañada Real del Camino Ancho, Puerto Real (Cádiz). Cámara habitual, objetivo Zuiko 14-45 mm, f: 8, 1/125 seg. ISO: 200, Procesado Picasa=máscara de enfoque y recorte parcial.

martes, agosto 15, 2006

Iphiclides podalirius




fam: Papilionidos
n.vulgar: podalirio o chupaleche.

Esta hermosa mariposa la encontramos campeando entre las flores del borde de la marisma, junto a la Dehesa de las Yeguas (Puerto Real). Como siempre íbamos Juanjo y yo mirando la flora de estos pinares y apareció ella con su majestuoso vuelo parándose a libar entre los limonios de la marisma. Al principio parecía que le gustaba el juego de acompañarnos, pero cuando puse el zoom largo para fotografiarla se acabó la complicidad. Más de media hora me costó sacarle algunas fotos, casi ninguna decente. Me quedo con ésta -que no es gran cosa- pero permite apreciar claramente su anatomía y especialmente sus ocelos (falsos ojos) que tiene tanto en el haz como en el envés de cada una de sus alas. Estos ocelos son esenciales para su supervivencia, lo mismo que los dos remates apicales de sus alas, con ellos consigue centrar sobre estos puntos no vitales de su anatomía los ataques de los pájaros e incluso desprenderse voluntariamente de ellos sin perjuicio de su capacidad para seguir volando. Es una especie de tamaño más bien grande, diurna, que se desarrolla de abril a julio y que se la ve volando hasta septiembre. En la Peninsula Ibérica prefiere las laderas de colinas y espacios abiertos rodeados de árboles. Nosotros la vimos en una franja de contacto entre los pinares y la marisma, siendo no muy frecuente su presencia en esta zona. Se distingue muy bien por sus largos remates de las alas, su colorido rayado y su vuelo pausado. En Sierra Nevada se puede contemplar un raro endemismo emparentados con esta podalirio (Iphiclides podalirius subsp. fleisthameli). Sus orugas se distinguen por poseer un órgano bifurcado detrás de la cabeza que proyecta como arma de defensa liberando al mismo tiempo un olor característico.

La foto: 8 de julio de 2006, Dehesa de las Yeguas, Puerto Real (Cádiz). Cámara Olympus E-500, objetivo Zuiko 45-150 mm. f:7.1, 1/1000 seg. ISO:800. Procesado: PICASA=recorte parcial+máscara de enfoque+máscara de desenfoque exterior.